MEC PROPONE CREAR UN SERVICIO DE MEDIOS PÚBLICOS DE COMUNICACIÓN

El director de la secretaría general del Ministerio de Educación y Cultura Pablo Álvarez explicó los alcances del artículo 176 de la Rendición de Cuentas que actualmente estudia el Parlamento. Mediante este artículo se crea el Servicio de Comunicación Audiovisual Nacional, que incluirá a la Televisión Nacional de Uruguay, las cuatro radios del SODRE y el Instituto del Cine y Audiovisuales del Uruguay.

El artículo propone que estos programas, con funciones del mismo carácter, naturaleza y fines, conformen una misma organización para racionalizar la administración y el funcionamiento en la órbita del Ministerio de Educación y Cultura (MEC). Los tres organismos mantendrán sus cometidos y objetivos específicos, en el marco de una dirección colegiada, que analizará impactos, esfuerzos y transformaciones de la unidad ejecutora.

Fortalecer gestión de medios de comunicación públicos – “A la luz del papel que los medios de comunicación cumplen, entendemos que deben ser fortalecidos y pretendemos que, al reunir en una misma unidad ejecutora a las radios públicas, el canal de televisión público y el ICAU, se complementen, se fortalezcan, y le den mayor proyección a los esfuerzos que desde el año 2005 a la fecha se vienen realizando”, concluyó Álvarez.

Para el director del MEC, esta iniciativa mejora los procesos administrativos de este rubro. Explicó que era muy difícil ejecutar la contratación de personal del área y entiende que hay personal que puede ser funcional a varios instrumentos -“en particular radio y televisión”-, explicitó, una tarea que sería  de coordinación más simple, en tanto dependerían de una misma unidad ejecutora. El artículo 176 también establece 90 días para elaborar la reglamentación del nuevo organismo. A partir de la aprobación parlamentaria, se procederá a la redacción más detallada de aspectos vinculados al pasaje de funcionarios, recursos materiales y créditos presupuestales hacia la nueva unidad ejecutora. Álvarez indicó que los trabajadores también participarán en el debate hacia la concreción de la institucionalidad propuesta.

Cabe señalar que un porcentaje de los minutos pautados por los entes públicos son volcados a la Televisión Nacional de Uruguay. Sobre las formas de financiamiento, Álvarez señaló que “eso funciona hoy para el canal; nosotros esperamos que, sin que ninguno pierda presupuesto, se pueda mejorar el servicio de cada uno de los organismos”. Si bien la recaudación no es el principal componente de un medio público, es comprensible que la calidad del servicio esté vinculada a la capacidad de su presupuesto.

“Hoy corre en primer lugar por Rentas Generales, pero también por la venta de servicios y entendemos que, estando en una misma unidad reguladora, se puedan fortalecer los aspectos comerciales de los medios, y a la vez que se pueda generar un mayor vínculo para la producción de contenidos nacionales con destino a la televisión”, ejemplificó.

Contenidos, profesionalidad y audiencia – El canal de televisión fue separado del SODRE en 2003, mientras que el ICAU funciona en la órbita de la dirección general del MEC desde el año pasado. Álvarez señaló que ese ministerio cuenta con diversos cometidos y que tiene por objetivo realizar un proceso de transformaciones administrativas para mejorar los recursos materiales y humanos para poder funcionar. “En esa reflexión estamos, que no se cierra acá, sino que prosigue en otras áreas como los museos nacionales que dependen del ministerio”, aclaró.

“La legislación nacional establece el reconocimiento de tres sectores de radiodifusión: el comercial, el público estatal y el comunitario, con sus particularidades. Nosotros entendemos que los medios públicos tienen un papel importante a la hora de entender los medios, en el marco de sus componentes de entretenimiento, información, educación y cultura. Endendemos que, en tanto no son organizados en función del rating, los medios públicos han de transmitir otros contenidos que, tal vez, por estas razones, no llegan a los medios comerciales, a la vez que no tienen por qué renunciar a los servicios informativos, desde una lógica diferente y respetando a la audiencia, a partir del trato profesional de la noticia y la información”.

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