A dos meses del cierre de una de las principales industrias del departamento, el sindicato que nuclea a los obreros de URUPANEL volvió a convocar a autoridades y ciudadanía para llevar a cabo una nueva manifestación por las calles céntricas de la capital departamental con el objetivo de continuar con la lucha por la reapertura de la planta y fuente de trabajo. La marcha se inició y culminó en Plaza 19 de Abril. En el lugar se levantó un estrado donde hicieron uso de la palabra el Obispo de la Diócesis de Tacuarembó, Miguel Ángel Bonino y el ex ministro de Ganadería y Agricultura Andrés Berterreche.
El acto comenzó con las estrofas del Himno Nacional ejecutado por la Orquesta de la Intendencia Departamental y luego el poeta Miguel Ángel Olivera Prietto leyó un poema de su autoría dedicado a los trabajadores de la planta cerrada.
Los diputados Edgardo Rodríguez, Martha Montaner y Antonio Chiesa, el Presidente de la Junta Departamental Pablo Gutiérrez, el senador Eber da Rosa, el secretario general de la comuna José Omar Menéndez, el presidente de la Agencia de Desarrollo de Tacuarembó Eduardo Puentes, el presidente de la Asociación Empresarial Mauricio Crespi y distintas figuras del quehacer social y político del departamento estuvieron presente en la manifestación. La misma fue cubierta por medios de comunicación nacionales y departamentales. El acto estuvo conducido por la periodista Giovanna Farías.
En su oratoria el obispo Miguel Bonino comenzó diciendo “los vecinos de nuestra ciudad, desde la pluralidad de nuestras posturas políticas y religiosas porque es una causa del bien común que nos une” para que “se vuelvan a abrir las puertas de esa importante fuente de trabajo que es URUPANEL”. En medio de la contienda electoral que vive nuestra sociedad “esta marcha es un signo muy positivo” porque más allá de las diferencias “somos capaz de juntarnos en un gesto solidario que hace crecer nuestro capital social” dijo el orador.
Destacó la labor del SOIMA en la defensa de los intereses vitales de sus compañeros “y si estamos aquí es que ellos han sido capaces de congregar y congregarse en primer lugar para custodiar la estructura de la fábrica y luego al correr de los días buscar caminos de solución para todos”. Bonino informó que hay 200 empleados de empresas locales afectados por la situación “incluso algunos han sido enviados al seguro de paro” y agregó que “URUPANEL está adeudando” $15 millones a empresarios locales “de unos 25 comercios proveedores de la industria maderera”. Recordó que en la fecha también se cumplen 10 años de la instalación de la industria en el departamento e hizo un repaso de la historia de la misma en la zona.
En parte de su alocución el jerarca eclesiástico indicó que “ya hace 60 días del cierre de URUPANEL, y no se han bajado los brazos en la búsqueda de soluciones. Nuevos desafíos sentimos que se nos están planteando ya que el capital inversor está cada vez más lejos de los obreros y a menudo es indiferente a los efectos sociales de las opciones que tiene que realizar. Estamos siendo advertidos que las relaciones laborales cambian vertiginosamente. Las empresas se mueven hoy en marcos económicos cada vez más amplios donde percibimos que los estados nacionales y las comunidades locales tienen que contar con nuevas capacidades para gobernar los rápidos procesos de cambio y es necesario madurar el diálogo con el capital inversor desde el inicio de su gestión.
Advertimos que es necesario crear mecanismos que reduzcan los efectos negativos de situaciones que estamos viviendo, como por ejemplo de fondos de garantía para las empresas proveedoras locales”. Y finalizó sosteniendo la viabilidad de la apertura de la fábrica “aunque los días son muy largos en la espera debemos evitar el error de considerar que los cambios que se están dando suceden de manera determinista” y afirmó “mantengamos viva la esperanza en la próxima reapertura de URUPANEL”.
Mientras que Andrés Berterreche reconoció “que esta lucha” es de los trabajadores y “cada uno de los tacuaremboenses” y trasmitió un saludo del Presidente de la República “que tiene el mismo desvelo que todos y cada uno de ustedes de que esta planta pueda volver a abrirse y que el resultado de sus viajes y sus acciones trascienden su propio gobierno, no lo hace en un interés personal sino en una visión que del futuro Tacuarembó se merece estar orgulloso de lo que ustedes mismos están defendiendo. Nunca más válida aquella consigna ‘que la lucha que se pierde es la que se abandona’ y pido a ustedes trabajadores y vecino que no abandonen esta lucha y que sigan con la esperanza que esto puede volver a abrirse”.
El 29 de julio pasado a las 10 de la mañana, administrativos de URUPANEL comunicaron a los operarios el cierre de la fábrica. Tras una asamblea obrera, se resolvió la ocupación inmediata de la misma a efectos de evitar su posible desguazamiento. 460 trabajadores pasaron al seguro de desempleo. La fábrica producía paneles y MDF para la exportación.
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Presidente Mujica promete que habrá salida para URUPANEL
El presidente de la República, José Mujica se reunió ayer en Tacuarembó con dirigentes del Sindicato Obrero de la Industria de la Madera y Anexos (Soima) y con integrantes de la Comisión Social de Integración (plataforma ciudadana de apoyo a los obreros de Urupanel) para tratar la situación de la maderera que cerró hace dos meses y se encuentra en concurso de acreedores. «Aunque demore algún tiempo vamos a encontrar la salida», manifestó el presidente a los representantes sindicales.
Mujica viajó recientemente a Finlandia y según transmitió a los dirigentes sindicales «hasta donde sabemos hay un par de interesados (en Urupanel) que se están moviendo. Estuvimos hablando con alguien que conoce a la empresa y que se está moviendo», según un comunicado del Soima. El presidente agregó que «nos movemos en la esfera privada, en donde hay mucho secreto, mucho sigilo, mucho misterio, por qué la naturaleza de los negocios lo imponen así».
«No sabemos cuál es a esta altura el desenlace», afirmó.
Mujica aconsejó a los trabajadores de Urupanel que se mantengan «reunidos» y que se respalden «en el pueblo de Tacuarembó todo lo más que puedan». Añadió que «solos, aislados, difícil que hagan roncha. Con toda la gente, no se les puede dar la espalda».
Durante esta reunión, el secretario general del Soima, Fernando Oyanarte, le detalló al mandatario, diversos aspectos de la gestión y funcionamiento de la empresa, así como la preocupación del gremio ante lo que supone 420 puestos de trabajos que se ven amenazados tras el cierre y que en la actualidad se encuentras en seguro de paro por cuatro meses, según el comunicado.
Actualmente se estima que Urupanel mantiene una deuda de US$ 3 millones con sus acreedores, de los cuales se estima que $ 15 millones (unos US$ 600.000) son con empresarios de Tacuarembó. Las deudas de Urupanel generan preocupación en la Asociación Empresarial de Tacuarembó que había señalado que unas 200 fuentes laborales serán afectadas directamente.
De. http://noticiasuy.com/
Foto: Fernando Oyanarte, José Mujica y Pedro Vázquez.
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