El Presidente José Mujica cerró el acto por el Día Internacional contra la Corrupción y sostuvo que las sociedades son cada vez más frívolas y que existe una forma de corrupción que es aquella del no querer ver, ni comprometerse, el “no te metas”. Agradeció a quienes luchan en esta cruzada como “Quijotes de nuestro tiempo” y habló en nombre de las víctimas ocultas de este flagelo moderno que quedan a lo largo y ancho del país. El mandatario habló en nombre del Estado uruguayo y de los que no tienen voz, de los que no llegan a los medios de prensa, de los que están en los distintos rincones del país y padecen las consecuencias de este flagelo contemporáneo como es la corrupción.
Afirmó que es un problema que tiende a multiplicarse “no porque las sociedades sean pobres, más bien porque nos estamos poniendo pobres los hombres y las mujeres, en términos de horizontes, de preocupaciones”. Asimismo sostuvo que los modelos culturales empujan de una forma u otra a considerar que el triunfo económico es la cosa más importante y que el mundo moderno es mucho más desprejuiciado, más abundante de medios económicos, más apurado, angustiado, demandante y no entiende ni el freno de las religiones ni el peso de la filosofía profunda del convencimiento. En tal sentido afirmó que el mundo siendo mucho más rico “es mucho más frívolo”.
Agregó que “en los varios caminos que tiene la corrupción, hay una corrupción muy sencilla que todos conocemos y demostramos, pero hay otros pliegues más profundos de la corrupción. El no ver lo evidente, el no querer verlo, el no querer asumir compromisos en la lucha, el no plantearlo, el no comprometerse, el no participar pero dejar correr. El no asumir, en definitiva, responsabilidades de conciencia para enfrentarlo, es tal vez el ‘no te metas’ una forma sorda de conceder a que en definitiva los puntos flacos que llevamos adentro encuentren el terreno más propicio para irse definiendo”. Reconoció que existen pactos tácitos, colectivos, donde nadie tiene una responsabilidad evidente pero todos coparticipan en alguna medida, llámese ‘vales de nafta’, que son medidas de canje pero que los paga el pueblo.
“A las viejas religiones las puede sustituir el freno filosófico de las ideas, pero nuestras sociedades son muy flojas en materia de ideas”, subrayó. Asimismo, agradeció a quienes invierten su tiempo en esta lucha como “Quijotes de nuestro tiempo” y agradeció también en nombre de la multitud de víctimas ocultas que quedan a lo largo y ancho del país, porque es enorme el caudal de energía que pierde una sociedad en estos temas. De presidencia.gub.uy
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