El Presidente de la República, José Mujica, subrayó nuevamente que el mundo se dirige hacia la construcción de grandes núcleos continentales y que América Latina está transitando el camino hacia la unidad del bloque como consecuencia de la época que nos toca vivir, del desarrollo económico y el impacto colosal de las fuerzas productivas que están cambiando al mundo. Mujica acompañó el saludo a Lula da Silva y Hugo Chávez. “Pienso que este clima que estamos viviendo, de gente que piensa muy distinto y, sin embargo, se da cuenta de que tenemos que andar juntos, nunca se vio en la historia de nuestra América”, reflexionó Mujica ante los mandatarios congregados en la Cumbre Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, que se celebra esta tarde en Santiago de Chile.
Según Mujica, este proceso “es una consecuencia de la época que nos toca vivir, somos funcionales al tiempo, el desarrollo y el impacto colosal de las fuerzas productivas que está cambiando al mundo”. Agregó que este proceso continuará porque el mundo se está organizando en gigantescas unidades. “Creo que eso anuncia un grado de unidad del mundo que no podemos ni siquiera soñar los hijos de los estados nacionales», reflexionó.
El Presidente Mujica manifestó que no son únicamente la historia y la cultura común las que obligan a los americanos a concretar este proyecto, sino que también “nos empuja el susto, la necesidad de defendernos”, porque “todos, instintivamente, tenemos conciencia de que para ser fuertes nos tenemos que juntar y que necesitamos andar juntos, y que cuanto más nos dividamos más débiles vamos a ser, y más dependientes”, concluyó.
En otro espacio de su discurso, Mujica valoró la importancia de la mujer como pilar de la sociedad civil, cuando expresó que “hay que volver a la familia y a la madre, no por razones tradicionales o instintivas, sino por la ley fundamental de la forma de vida de los primates, que no podemos prescindir de la madre, el primer instrumento de la educación”. Para José Mujica, el mundo se debe una discusión sobre la función política de la mujer como clave de la vida humana.
Finalmente, recordó que, en la actualidad, “la cultura contemporánea es funcional a las necesidades del mercado y no necesariamente funcional a las necesidades de la vida”. “Que nuestros gurises derrochen de entrada es funcional al mercado, pero no a la vida. Después queremos cuidar el medio ambiente, pero no educamos al pichón desde abajo, tratando de crear una cultura que ampare y defienda la vida», dijio.
Concluyó en que nuestra cultura uruguaya «da por tácitos algunas cosas que no lo son». “Nuestra cultura está embebida de lo que conviene a la acumulación capitalista: Todo es negocio”, expresó, por lo cual indicó que la enseñanza y la construcción de una cultura son de los temas más importantes que se deberán discutir en las próximas agendas entre los presidentes de este bloque continental.
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