Este año, el Día Mundial de la Libertad de Prensa tiene ese lema. Como se comprende, su mensaje se centra en la seguridad de los periodistas y en el combate a la impunidad de los crímenes contra la libertad de expresión
El 3 de mayo es, desde hace 20 años, el Día Mundial de la Libertad de Prensa. El secretario general de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, destacó que “en todas las regiones del planeta los periodistas son asesinados por denunciar a gobiernos, corporaciones, bandas del crimen organizado y otros que desean silenciar y censurar sus investigaciones.”
Además “otros cientos de comunicadores han sido detenidos y muchos languidecen en prisión durante años en condiciones brutales, como resultado de juicios fingidos o acusaciones falsas.”
”Según la UNESCO, más de 600 periodistas fueron asesinados durante la última década. En las regiones del Medio Oriente y Asia Pacífico ocurrieron el 64% de esas muertes. América Latina les sigue con el 19 %.
En Uruguay la Libertad de Prensa enfrenta desafíos de otro orden, completamente diferentes. La libertad de expresión es la norma y las presiones son lamentables episodios aislados. La violencia contra los periodistas y los medios prácticamente no existe en nuestro país.
Para nosotros, la censura indirecta ejercida a través de la asignación de la publicidad oficial, el acceso a la información pública y la actividad de poderosos grupos de interés en el sector de los medios, son algunos de los asuntos que nos preocupan.
No tienen el carácter dramático que alcanzan en otros países, pero debemos ocuparnos de ellos porque afectan nuestra tarea.
En este 3 de mayo alegrémonos por lo que tenemos y asumamos el compromiso de mejorar nuestra profesión comprometiendo, todos los días, nuestro mejor esfuerzo.
David Rabinovich
Fuente: Página web de ONU.
De OPI
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